Uno de los mayores desafíos que enfrentan las madres solteras es la carga de tener que tomar decisiones por sí solas. Cada día estás rodeada de decisiones —grandes y pequeñas— que impactan a tu familia.
Con el tiempo, la presión constante de tomar decisiones sabias puede volverse abrumadora. Tal vez empieces a sentir ansiedad, inseguridad o incluso a dudar de tu propio juicio. También puede aparecer la tentación de tomar decisiones rápidas o convenientes solo para seguir adelante, aunque no siempre sea el mejor camino.
Si esto te suena familiar, ten ánimo: no estás sola.
Este artículo es la segunda parte de nuestra serie de 10 capítulos inspirada en el libro Las 10 mejores decisiones que puede tomar una madre soltera. Está diseñada para brindar a las madres solteras consejos prácticos que les ayuden a transitar esta etapa con más paciencia, amabilidad y gracia. En este capítulo, las autoras Pam Farrel y PeggySue Wells animan a las madres solteras a “decidir ser decididas”. (Si te perdiste el primer artículo, puedes leerlo aquí).
Aquí tienes un mensaje de ánimo y un consejo práctico para madres solteras que están aprendiendo a tomar decisiones con gracia y claridad.
Decide ser decidida
Al transitar la vida como madre soltera, no es raro que empieces a cuestionar tu capacidad para tomar buenas decisiones —especialmente si experiencias pasadas, como una relación rota, te han llevado a dudar de tu propio juicio.
Pero la verdad es que tu capacidad para tomar decisiones claras y seguras no solo es esencial —también puede fortalecerse con intención, práctica y fe.
Como madre soltera, enfrentas decisiones importantes todos los días. Aprender a confiar en ti misma —y en Dios— al tomarlas es clave para construir un hogar sano y lleno de esperanza.
Aquí tienes 4 ideas clave del capítulo 2 que te ayudarán a silenciar las dudas, superar el miedo y tomar decisiones con sabiduría y valentía:
- Pide sabiduría a Dios. ¡No tienes que resolverlo todo sola! La Biblia dice que Dios da sabiduría generosamente a quien se la pide (Santiago 1:5). Ora al Señor y pídele que te guíe para tomar la mejor decisión en cada situación.
- Evita la fatiga de decisiones. Sé intencional con las decisiones que debes tomar. Si te cuesta decidir por los demás o sueles dejar que otros decidan por ti, tómate un momento para definir quién debe realmente tomar la decisión en cada caso. También puedes apoyarte en los valores de tu familia para decidir con claridad, en lugar de reaccionar bajo presión.
- Haz “lo siguiente que sea correcto”. Cuando no sepas qué decisión tomar, da un paso —aunque sea pequeño— en la dirección correcta. Tal vez sea hacer ejercicio, hablar con una mentora o hacer algo que produzca buenos frutos en tu vida.
- Busca consejo sabio. Las autoras de este capítulo animan a las madres solteras a formar un pequeño “equipo de decisiones” con personas de confianza, que te ayuden a pensar con claridad y discernimiento espiritual, sin juzgarte. Este equipo debe estar formado por personas maduras en la fe, emocionalmente estables y con experiencia en las áreas donde necesitas apoyo.
CONCLUSIÓN CLAVE
Tomar decisiones es como un músculo: mientras más lo usas, más fuerte se vuelve. Las madres solteras toman decisiones importantes con frecuencia. Usa estos consejos para aprender a confiar en tu propio juicio y tomar decisiones con seguridad —decisiones que impacten positivamente a tu familia.
“Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla.” ~ Santiago 1:5 (NTV)
APLICACIÓN
Cuando Dios nos llama a una nueva etapa de la vida, es normal sentir miedo —tanto nosotros como nuestros hijos. Recuérdale a tu familia la importancia de tener fe donde sea que Dios nos llame compartiendo con ellos Como Noé, una historia bíblica interactiva.
Encuentra esta actividad y muchas más en la colección de Momentos Cotidianos™.